Solo "Amor y Paz" | Cristianismo Hippie


Hay algunos cristianos que hacen un énfasis cuasiúnico en el "amor y paz", de tal forma que, cualquier reprensión, exhortación o llamado a la obediencia, aún viniendo directamente de la mismísima Palabra de Dios, lo consideran fuera de lugar y falto de —sí, adivinaste— amor. Inmediatamente lanzan el consabido reclamo de "no juzgues" y el famoso cuestionamiento: "¿dónde está tu amor cristiano?", y esgrimen con singular habilidad el versículo trece de Primera de Corintios capítulo trece: "Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor" y conlcuyen: "¿Lo ves? Lo más importante es el amor, nada más". Esto es a lo que yo llamo "Cristianismo Hippie"*.

Estos cristianos tal vez ignoran, o pretenden ignorar lo que el Apóstol Juan expresó en su Primera Carta: "Pues este es el amor a Dios, que guardemos sus mandamientos; y sus mandamientos no son gravosos" (5:3), entre otros pasajes que hablan de cómo Dios dice que debemos amarlo a Él y al prójimo.

Es importante comprender que, es el amor de Dios en nosotros lo que nos capacita para amarlo a Él y a nuestro prójimo; es lo que hace posible que obedecerlo no sea gravoso: que no sea solo por temor y simple obligación. Amar a Dios verdaderamente, no cancela sus mandamientos ni nuestra responsabilidad de realizar las buenas obras que Él preparó previamente: "Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas" (Ef 2:10).

Entendamos que nuestra obediencia, evidencia nuestra pertenencia a y amor por el Señor:

"Y llamando a la gente y a sus discípulos, les dijo: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame" (Mr 8:34).

"Si me amáis, guardad mis mandamientos" (Jn 14:15).

Estoy de acuerdo con ​Catherine Scheraldi de Núñez, quien habla de la obediencia en su artículo "¿Obedezco por temor o amor?", y dice: "Obedecer por temor es un buen lugar donde comenzar, pero obedecer por amor es donde eventualmente debemos llegar si entendemos que somos perdonados por Cristo […] Sigamos y obedezcamos a nuestro Señor, no solamente por temor, sino también por amor".

Así que, necesariamente estoy en desacuerdo con aquellos que promueven y viven el "Cristianismo Hippie", quienes exaltan 1 Co 13:13 y menosprecian 1 Juan 5:3, y para quienes el "amor y paz", parecen ser irreconciliables con la obediencia y la responsabilidad que la Santa Biblia enseña.

Amemos a Dios, no cómo nosotros lo definamos, sino como Él lo ha establecido en su Palabra.


* Estos son cristianos que, tal vez sin saberlo, son adeptos de la Ética Situacional: el amor manda, lo es todo, y justifica los medios si el fin tiene por motivo al amor.

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Imagen original de fondo: Museum Wales